Los reglamentos de tránsito son documentos en donde se establecen restricciones y sanciones para proteger la integridad de los ciudadanos al andar por la ciudad, contemplando tanto al peatón, como a los conductores.

Si bien en cada estado de la República Mexicana hay un reglamento particular, hay órdenes generales que aplican en todo el país, algunas de ellas muy intuitivas, que por sentido común, no deberían ser esclarecidas, sino dadas por hecho, pero como en todo: ¡Sacamos el GANDALLA que llevamos dentro a nuestra conveniencia!

Ser Gandalla en las calles, es una generalización dada por la regular o mala educación vial que llevamos por cultura y/o egocentrismo, quizá algunos más que otros, algunos por convicción y otros tantos por ignorancia, pero no es un hecho el que nos tengamos que quedar de brazos cruzados, ¡Hagamos algo!

NO SEAS GANDALLA.

No hace falta ver las cifras de muertes (1.3 millones de personas al año)*, preguntar a algun discapacitado y que respondan que son traumatismos popr accidentes en coche, tampoco hace falta saber de memoria todo el reglamento para ser mejores informándonos y aplicando lo aprendido en el día a día.

Algunas acciones sencillas y para empezar, podrían ser:

• Usar las direccionales
• Ceder el paso al peatón
• Esperar pacientemente si un camión está dejando o tomando pasaje
• Estacionarse en los lugares asignados
• Respetar los automóviles de emergencia

Quizá algunos digan, «No nos cuesta nada», la verdad es que sí, puede que no sea fácil, que romper la costumbre nos lleve a un proceso de aprendizaje que parezca un ciclo vicioso sin fin, pero en el intento pueden salir cosas buenas.

*Reporte por la Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de AUTOFACT, Diciembre 2021.